viernes, 25 de noviembre de 2011

BREVIPENNE

¡Las apariencias engañan! Es cierto que con unas raíces tan aparentemente claras y clasificado en la categoría de Biología, el término de hoy puede dar lugar a fáciles juegos de palabras. Pero, ¡no dejéis volar tanto vuestra pícara imaginación!
No la dejéis volar porque brevipenne, según la Real Academia, es precisamente un adjetivo empleado para referirse a las aves corredoras. También puede ser utilizado como sustantivo femenino y, con mayúscula inicial, como taxón en desuso: las Brevipennes. Para sacaros de vuestro asombro comentaremos que su etimología engañosa proviene del latín brevis, breve, y penna, pluma.

Este grupo de las aves corredoras alberga especies con patas robustas, cuellos largos y plumas con aspecto de pelo, generalmente de gran tamaño y a cada cual más simpática. Descubriremos algo sobre algunas de ellas:

El miembro más representativo es el avestruz africano (Struthio camelus), el ave más grande y pesada del mundo en nuestros días. Los mayores ejemplares pueden alcanzar cerca de los tres metros y superar los 150 kilos de peso. Su nombre científico nos da una idea de ello pues significa curiosamente "gorrión como un camello".
Sus poderosas patas le permiten alcanzar velocidades de 60-70 km/h. De ahí que salir corriendo sea su respuesta habitual ante cualquier peligro, aunque en ocasiones también pueda defenderse a patadas o bajar la cabeza a ras de suelo para parecer un arbusto y pasar desapercibido. En ningún caso esconde la cabeza bajo el suelo, es una falsa creencia popular.

El casuario es otra especie no voladora que habita en las selvas lluviosas tropicales de Australia y Nueva Guinea; más concretamente es un grupo que actualmente componen tres especies del género Casuarius. Su cuerpo es compacto y su plumaje es negro, pero lo que resulta más característico es su cuello coloreado de rojo y  azul y su gran protuberancia osea sobre la cabeza. También destaca su temperamento agresivo que la hace ser considerada como el ave más peligrosa del mundo, al ser capaz de matar a una persona con sus garras hipertrofiadas.

El emú (Dromaius novaehollandiae) es otra especie de origen australiano. Es la segunda en tamaño, alcanzando cerca de los dos metros y los 50 kilos de peso. Si bien no puede volar, es una especie nómada que recorre las llanuras pudiendo llegar a desplazarse al trote distancias superiores a los 500 kilómetros en busca de alimento.

La última ave corredora es el ñandú (Rhea americana). Parecida al avestruz, habita principalmente en las zonas de llanura de Sudamérica. Su ciclo de reproducción es llamativo pues el macho construye un nido en el que varias hembras depositan sus huevos, que el macho se encargará de incubar. Esta especie tiene una vital importancia en su relación con el hombre pues es una de la piezas principales de caza; se aprovecha su carne, pero también su cuero en marroquinería, sus plumas para plumeros y trajes del carnaval brasileño, su grasa en cosmética y los huevos infértiles en artesanía.
Pero quizá lo más curioso de esta especie sea su nombre. Además de ser una de las escasas palabras que comienzan con nuestra 'ñ', procede del guaraní, ñandú, avestruz y araña, y parece que puede deberse a un conjunto de símiles: su plumaje se asemeja a las arañas peludas amazónicas, sus largas patas son del tipo de las tarántulas y el conjunto del individuo recuerda a una gigantesca araña cuando está echado.

Y bueno, por hoy más que suficiente! Que al final la entrada de las Brevipennes no ha sido tan breve!!

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